Quito, Ecuador. En una noche mágica en el estadio Rodrigo Paz Delgado, Liga Deportiva Universitaria de Quito dio un paso firme rumbo a la final de la Copa Libertadores, al vencer con contundencia 3-0 a Palmeiras en el partido de ida de las semifinales.
El encuentro comenzó con un arranque fulminante del conjunto albo. Apenas iniciado el compromiso, Gabriel Villamil aprovechó un error defensivo del cuadro brasileño y, con un potente remate, abrió el marcador, encendiendo la euforia de los más de 40 mil aficionados presentes en Casa Blanca.
Lejos de conformarse, el equipo dirigido por Tiago Nunes mantuvo la presión y encontró su segunda conquista desde los doce pasos. Lisandro Alzugaray, con gran categoría, transformó el penal en gol para ampliar la ventaja y consolidar el dominio quiteño.
Antes del descanso, Villamil volvió a hacerse presente, culminando una jugada colectiva que dejó sin respuesta al portero Carlos dos Santos Pereira, sellando un primer tiempo perfecto para los locales.
En el complemento, Palmeiras intentó reaccionar, pero se topó con una defensa sólida y un estadio que empujó sin cesar. Liga administró el resultado con inteligencia y mantuvo su arco en cero, dejando la llave bien encaminada de cara al duelo de vuelta en Allianz Parque.
Con esta victoria, Liga de Quito ilusiona a su hinchada con regresar a una final continental y demuestra, una vez más, que en la altura del Rodrigo Paz Delgado es un rival temible.